Traductor

martes, 22 de enero de 2013

PATRIMONIO CULTURAL: San Blas (Albalate de Zorita)



FESTIVIDAD DE SAN BLAS


El día de 3 de febrero la localidad alcarreña de Albalate de Zorita celebra sus tradicionales fiestas en honor a San Blas, donde caridades, cachiporras y botargas se convierten en  protagonistas entre sus vecinos para honrar al Santo que fue médico, obispo y mártir cristiano, patrono de los enfermos de garganta y de los otorrinolaringólogos. De hecho el origen de la costumbre de bendecir las gargantas el día de su fiesta se debe a que salvó la vida de un niño que se ahogaba al trabársele en la garganta una espina de pescado.

Todo comienza el día 23 de enero, día de San Ildefonso (o el domingo posterior si éste no cayera en domingo)  con la tradicional, y simbólica en la actualidad, aporreada de puertas de la localidad. Esta tradición  consistente en recorrer las casas de la localidad para pedir dinero, (antiguamente trigo) para confeccionar las caridades de San Blas. En esta carrera de pedir participan la corporación municipal, miembros de la Hermandad del Santo, acompañados por un buen número de chiquillos, los cuales en otros tiempos portaban tambores para anunciar su presencia en las calles y también las clásicas cachiporras de sabina y enebro para golpear en aquellas puertas que no eran abiertas, incluso les acompañaban burros con alforjas donde se transportaba el trigo entregado por los vecinos.


De este modo todo el cortejo recorre las calles del pueblo pidiendo, de puerta en puerta,  un donativo totalmente voluntario con el que después se financiarán las típicas caridades de San Blas, siendo éstos unos panecillos fabricados con anís y aguardiente que simulan la forma del gorro con que se toca a su patrón, San Blas, y a los que se le atribuyen propiedades curativas para la garganta de todos aquellos que la toman. Tanta es la fe que profesan los vecinos de Albalate, que éstos se la dan a comer a niños, ancianos, enfermos e incluso a animales domésticos y de corral.

Actualmente estas caridades se elaboran en las panaderías a las que acuden las mujeres del pueblo de forma voluntaria para ayudar en estos menesteres para luego ser bendecidas y repartidas entre la vecindad por las autoridades y mayordomos del Santo el día 2 de febrero, festividad de la Candelaria, donde en la eucaristía también se presentan a la Virgen los niños nacidos a lo largo del último año.

El día de San Blas, tras la misa mayor se saca en procesión la imagen del Santo ante los gritos de la multitud asistente y muy en especial de las botargas. Acompañada por el baile cada vez más frenético de las botargas, la procesión va recorriendo las calles, mientras los albalateños montan a sus hijos sobre las antas que llevan al Santo.

No dejan de sonar los tambores y las castañuelas a lo largo de todo el recorrido.  Es un sonido monótono, penetrante, incitativo a ese baile de las botargas que danzan delante del Santo, abriendo camino, ayudadas por el sonido y por la fe, gritando continuamente: ¡Que viva San Blas!, ¡Que viva San Blas!, y de vez en cuando dejando escapar algún que otro “piropo” (aunque a oídos de los foráneos parezcan insultos, como recuerdo a su vida de pecador).

Los botargas  van vestidos con trajes singulares, pantalón, chaqueta y gorro de colores rojo y amarillo los más, verde y rojo algunos, que incluyen adornos de origen celtibero y cascabeles que suenan al ritmo de su danza.

Al regresar el Santo a la puerta de la Iglesia se subastan las borlas y se introduce en la Iglesia al Santo de espaldas, mirando al gentío para que bendiga al pueblo.
Sin duda, esta procesión es de las más singulares y espectaculares de la provincia,  declarada de Interés Turístico Provincial, llegando a tardar en su recorrido hasta cinco horas ya que los botargas, en su afán de mantener al Santo en las calles del pueblo, no le dejan avanzar con sus danzas.  La primera noticia escrita que se tiene a cerca de esta fiesta data de 1789:
“…que de inmemorial en este pueblo se celebra el día del Señor San Blas…”

El día 4 o de San Blasilio, un botarga subastará en la plaza los donativos que los albalateños ofrecieron al Santo, allí mismo también se repartirán  caridades y la sabrosa garnacha.

PIROPOS AL SANTO
Viva San Blas Bendito
Glorioso en el cielo
Y aquí te sacan
Entre cuatro borrachos del pueblo.
San Blas, San Blasete
Cuídanos la garganta
Para que el año que viene
Te podamos decir:
¡Viva San Blas!
Ojos de puterete.
¡Pero qué ojillos de puterete
Tienes, San Blas Bendito!
¡Borrachín!
Qué viva San Blas
Con el culo atrás
Y la tripa “alante”
“Pa” que no se espante.
Viva San Blas bendito
Cuídanos bien a las mozas
Pa que tengan muchos hijos
Y monten en tu carroza.
Viva San Blas bendito
Cuídanos bien las gargantas
Para decirte borracho y puterete
Con la voz muy alta.

Albalate de Zorita es un pueblo lleno de matices y digno de visitarse donde la tradición se mantiene viva. 

Texto: Covadonga Pastrana ; Mª Angeles Rajas y Raúl Miguel Ortega.

Fotografía: Manuel Merchante

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Os agradecemos vuestros comentarios.